El proyecto de rebranding de Pisco Tres Erres se centró en rejuvenecer su empaque y modernizar la imagen de marca, buscando atraer a un público más joven sin perder a sus consumidores fieles. El rediseño del packaging combinó elementos de tradición y modernidad, con tipografías dinámicas, colores vibrantes y mensajes claros que destacaban la calidad del producto. Esta nueva estética disruptiva logró posicionar a Tres Erres como una opción innovadora dentro de la categoría de piscos, conectando de manera efectiva con las nuevas generaciones de consumidores.