En un mercado inundado de marcas tácticas, sin historia, sin respaldo, marcas que nacen y mueren, marcas que se sustentan en historias ficticias y en mensajes sin profundidad, Ochagavia tiene la ventaja de tener una importante trayectoria e historia, pero sin una identidad sólida y atractiva.La historia de esta viña, es el inicio de la historia del vino chileno.Con un inicio de una marca como este, fue imposible dejarlo de lado, pero al mismo tiempo estábamos rodeados de códigos tradicionales y repetitivos usados por las viñas durante décadas.Nuestro desafío fue cómo transformar esos códigos, en un lenguaje que es fiel a su esencia y que toma más valor con el tiempo, transmitiendo la esencia de un clásico.Un clásico, es algo que tiene un valor perdurable y una cualidad atemporal.